sábado, 11 de julio de 2015

Bajo el agua

Bajo el agua todos somos iguales, ágiles y gráciles independientemente del tipo de cuerpo que tengamos y de cómo lo movamos en la superficie; nuestra melena se vuelve sedosa y flota y nos envuelve la cara convirtiéndonos en sirenas por unos momentos -según lo que cada uno pueda aguantar la respiración. Luego emergemos boqueando indignamente, con un ojo cerrado y el pelo pegado a la cara como una nutria, pero esos momentos de gloria no nos los quita nadie.




La semana que viene pienso darme un chapuzón, aun no sé si en agua salada, dulce o con cloro, pero la sirena que habita en mí reclama ser liberada y no le voy a negar el capricho. Mientras tanto, me he entretenido (como si no tuviera mogollón de trabajo atrasado ni nada) creando esta escena tan fresquita con una de esas verdades aplastantes del verano: bajo el agua todas (y todos) tenemos pelo de sirena.

  



Aunque la foto que saqué anoche mientras hacía pruebas quedó mucho más acuática.



¡Feliz y sirénido fin de semana!

3 comentarios:

Madame Cinnamon dijo...

¡Aaaaaaaay, qué cuqui!

THE YLLW LINE dijo...

¡Qué divertida! ¡Todos a darse un chapuzón y sirenear un rato! ¡Besicos!

un crochet andalou dijo...

Sabes que escrbes poesía con tus manos ?