-Broches muñeco (a.k.a. Manjula y El moderno). Ella está hecha con camisetas y una blusa que se quemó con la plancha; él, con camisetas y el bajo de un pantalón.
-Gatomisifú. Está tan claramente inspirado en mi gatogordo que ha acabado viniéndose conmigo a la casita marrón. Está hecho con la pernera de unos leggins, una camiseta, un retal de una fiesta de fin de curso y el cordón de una cortina de exposición.
-Pulseras hechas con tiras de camisetas trenzadas y una bufanda de propaganda que alguien me dio porque sabía que le encontraría otro uso.
-Marcapáginas hechos con las varillas de un abanico roto. Arranqué una, le di la vuelta y ¡era claramente un árbol!
-Setas decorativas hechas con tapones de corcho. Llevaba mucho tiempo queriendo llevar a cabo esta idea, y ya tenía una buena colección de tapones de corcho. Creo que las colocaré en las macetas :)
Como veis, todo puede tener una segunda vida, ¡no tireis nada (y acabareis como yo, nadando entre retales y trastos varios)! Me voy a cenar al fresquito del patio, ¡hasta otra!